Spagnolo
Vocabolario e frasi
* Mas, viniéndole a la memoria los consejos de su huésped cerca de las prevenciones tan necesarias que habÃa de llevar consigo, especial la de los dineros y camisas, determinó volver a su casa y acomodarse de todo, y de un escudero, haciendo cuenta de recibir a un labrador vecino suyo, que era pobre y con hijos, pero muy a propósito para el oficio escuderil de la caballerÃa.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —Del sahumerio os hago gracia —dijo don Quijote—; dádselos en reales, que con eso me contento, y mirad que lo cumpláis como lo habéis jurado; si no, por el mismo juramento os juro de volver a buscaros y a castigaros, y que os tengo de hallar aunque os escondáis más que una lagartija.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —Ni aun fuera bien que vos le entendiérades —respondió el cura—; y aquà le perdonáramos al señor capitán que no le hubiera traÃdo a España y hecho castellano, que le quitó mucho de su natural valor; y lo mismo harán todos aquellos que los libros de verso quisieren volver en otra lengua; que, por mucho cuidado que pongan y habilidad que muestren, jamás llegarán al punto que ellos tienen en su primer nacimiento.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Y tengo para mà que ha de ser cosa muy de ver; a lo menos, yo no dejaré de ir a verla, si supiese no volver mañana al lugar( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —¿No han vuestras mercedes leÃdo —respondió don Quijote— los anales e historias de Ingalaterra, donde se tratan las famosas fazañas del rey Arturo, que continuamente en nuestro romance castellano llamamos el rey Artús, de quien es tradición antigua y común en todo aquel reino de la gran Bretaña que este rey no murió, sino que, por arte de encantamento, se convirtió en cuervo, y que, andando los tiempos, ha de volver a reinar y a cobrar su reino y cetro; a cuya causa no se probará que desde aquel tiempo a este haya ningún inglés muerto cuervo alguno? Pues en tiempo deste buen rey fue instituida aquella famosa orden de caballerÃa de los caballeros de la Tabla Redonda, y pasaron, sin faltar un punto, los amores que allà se cuentan de don Lanzarote del Lago 98con la reina Ginebra, siendo medianera de ellos y sabidora aquella tan honrada dueña Quintañona, de donde nació aquel tan sabido romance y tan decantado en nuestra España de Nunca fuera caballero de damas tan bien servido, como fuera Lanzarote cuando de Bretaña vino, con aquel progreso tan dulce y tan suave de sus amorosos y fuertes fechos( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* — Con todo eso —replicó el caminante—, me queda un escrúpulo, y es que muchas veces he leÃdo que se traban palabras entre dos andantes caballeros, y, de una en otra, se les viene a encender la cólera, y a volver los caballos y tomar una buena pieza del campo, y luego, sin más ni más, a todo el correr dellos, se vuelven a encontrar, y en mitad de la corrida se encomiendan a sus damas; y lo que suele suceder del encuentro es que el uno cae por las ancas del caballo pasado con la lanza del contrario de parte a parte, y al otro le viene también, que, a no tenerse a las crines del suyo, no pudiera dejar de venir al suelo.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —No vengo, ¡oh Ambrosio!, a ninguna cosa de las que has dicho —respondió Marcela—, sino a volver por mà misma y a dar a entender cuán fuera de razón van todos aquellos que de sus penas y de la muerte de Grisóstomo me culpan; y asÃ, ruego a todos los que aquà estáis me estéis atentos, que no será menester mucho tiempo, ni gastar muchas palabras para persuadir una verdad a los discretos.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Pero, dejando esto aparte, dÃgame vuestra merced qué haremos deste caballo rucio rodado, que parece asno pardo, que dejó aquà desamparado aquel Martino que vuestra merced derribó; que, según él puso los pies en polvorosa y cogió las de Villadiego, no lleva pergenio de volver por él jamás, y ¡para mis barbas si no es bueno el rucio! —Nunca yo acostumbro —dijo don Quijote— despojar a los que venzo, ni es uso de caballerÃa quitarles los caballos y dejarlos a pie; si ya no fuese que el vencedor hubiese perdido en la pendencia el suyo; que, en tal caso, lÃcito es tomar el del vencido, como ganado en guerra lÃcita.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Hecho esto, almorzaron de las sobras del real que del acémila despojaron, bebieron del agua del arroyo de los batanes, sin volver la cara a mirarlos: tal era el aborrecimiento que les tenÃan, por el miedo en que les habÃan puesto( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Lo que vuestra merced puede hacer, y es justo que haga, es mudar ese servicio y montazgo de la señora Dulcinea del Toboso en alguna cantidad de avemarÃas y credos, que nosotros diremos por la intención de vuestra merced, y esta es cosa que se podrá cumplir de noche y de dÃa, huyendo o reposando, en paz o en guerra; pero pensar que hemos de volver ahora a las ollas de Egipto, digo a tomar nuestra cadena y a ponernos en camino del Toboso, es pensar que es ahora de noche, que aún no son las diez del dÃa, y es pedir a nosotros eso como pedir peras al olmo( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Apenas le oà yo decir esto, cuando, movido de mi afición, aunque su determinación no fuera tan buena, la aprobara yo por una de las más acertadas que se podÃan imaginar, por ver cuán buena ocasión y coyuntura se me ofrecÃa de volver a ver a mi Luscinda.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Sucedió, pues, que, como el amor en los mozos por la mayor parte no lo es, sino apetito, el cual, como tiene por último fin el deleite, en llegando a alcanzarle se acaba y ha de volver atrás aquello que parecÃa amor, porque no puede pasar adelante del término que le puso naturaleza, el cual término no le puso a lo que es verdadero amor...; quiero decir, que asà como don Fernando gozó a la labradora, se le aplacaron sus deseos y se resfriaron sus ahÃncos, y si primero fingÃa quererse ausentar por remediarlos, ahora de veras procuraba irse por no ponerlos en ejecución.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Ãbanse poco a poco entrando en lo más áspero de la montaña, y Sancho iba muerto por razonar con su amo, y deseaba que él comenzase la plática por no contravenir a lo que le tenÃa mandado; mas no pudiendo sufrir tanto silencio, le dijo: —Señor don Quijote, vuestra merced me eche su bendición y me dé licencia, que desde aquà me quiero volver a mi casa, y a mi mujer y a mis hijos, con los cuales, por lo menos, hablaré y departiré todo lo que quisiere; porque querer vuestra merced que vaya con él por estas soledades de dÃa y de noche, y que no le hable cuando me diere gusto, es enterrarme en vida.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —Sea ansà —dijo Sancho—; hable yo ahora, que después Dios sabe lo que será; y comenzando a gozar de ese salvoconduto, digo que ¿qué le iba a vuestra merced en volver tanto por aquella reina Magimasa, o como se llama? O ¿qué hacÃa al caso que aquel Abad fuese su amigo o no? Que si vuestra merced pasara con ello, pues no era su juez, bien creo yo que el loco pasara adelante con su historia, y se hubieran ahorrado el golpe del guijarro y las coces, y aun más de seis torniscones( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Pues ¡montas que no se librara Cardenio por loco! —Contra cuerdos y contra locos —respondió don Quijote— está obligado cualquier caballero andante a volver por la honra de las mujeres, cualesquiera que sean; cuanto más por las reinas de tan alta guisa y pro como fue la reina Madásima, a quien yo tengo particular afición por sus buenas partes; porque, fuera de haber sido fermosa, además fue muy prudente y muy sufrida en sus calamidades, que las tuvo muchas.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Y más le ruego, que haga cuenta que son ya pasados los tres dÃas que me ha dado de término para ver las locuras que hace, que ya las doy por vistas y por pasadas, en cosa juzgada, y diré maravillas a mi señora; y escriba la carta y despácheme luego, porque tengo gran deseo de volver a sacar a vuestra merced deste purgatorio donde le dejo( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Pero ¿sabe vuestra merced que temo que no tengo de acertar a volver a este lugar donde agora le dejo, según está de escondido? —Toma bien las señas, que yo procuraré no apartarme destos contornos —dijo don Quijote—, y aun tendré cuidado de subirme por estos más altos riscos, por ver si te descubro cuando vuelvas.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* El canto se acabó con un profundo suspiro, y los dos con atención volvieron a esperar si más se cantaba; pero viendo que la música se habÃa vuelto en sollozos y en lastimeros ayes, acordaron de saber quién era el triste, tan estremado en la voz como doloroso en los gemidos; y no anduvieron mucho, cuando, al volver de una punta de una peña, vieron a un hombre del mismo talle y figura que Sancho Panza les habÃa pintado cuando les contó el cuento de Cardenio; el cual hombre, cuando los vio, sin sobresaltarse, estuvo quedo, con la cabeza inclinada sobre el pecho, a guisa de hombre pensativo, sin alzar los ojos a mirarlos más de la vez primera, cuando de improviso llegaron( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Aquella noche hablé con Luscinda, y le dije lo que con don Fernando quedaba concertado, y que tuviese firme esperanza de que tendrÃan efeto nuestros buenos y justos deseos; ella me dijo, tan segura como yo de la traición de don Fernando, que procurase volver presto, porque creÃa que no tardarÃa más la conclusión de nuestras voluntades que tardase mi padre de hablar al suyo.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* En fin, yo salà de aquella casa y vine a la de aquel donde habÃa dejado la mula; hice que me la ensillase; sin despedirme dél subà en ella, y salà de la ciudad sin osar, como otro Lot, volver el rostro a miralla; y, cuando me vi en el campo solo y que la oscuridad de la noche me encubrÃa y su silencio convidaba a quejarme, sin respeto o miedo de ser escuchado ni conocido, solté la voz y desaté la lengua en tantas maldiciones de Luscinda y de don Fernando, como si con ellas satisficiera el agravio que me habÃan hecho.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Que trata de la nueva y agradable aventura que al cura y barbero sucedió en la mesma sierra FelicÃsimos y venturosos fueron los tiempos donde se echó al mundo el audacÃsimo caballero don Quijote de la Mancha, pues por haber tenido tan honrosa determinación como fue el querer resucitar y volver al mundo la ya perdida y casi muerta orden de la andante caballerÃa, gozamos ahora, en esta nuestra edad, necesitada de alegres entretenimientos, no sólo de la dulzura de su verdadera historia, sino de los cuentos y episodios4433 della, que, en parte, no son menos agradables y artificiosos y verdaderos que la misma historia.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Con lo que Cardenio dijo se acabó de admirar Dorotea, y por no saber qué gracias volver a tan grandes ofrecimientos, quiso tomarle los pies para besárselos, mas no lo consintió Cardenio; y el licenciado respondió por entrambos y aprobó el buen discurso de Cardenio y, sobre todo, les rogó, aconsejó y persuadió que se fuesen con él a su aldea, donde se podrÃan reparar de las cosas que les faltaban, y que allà se darÃa orden cómo buscar a don Fernando, o cómo llevar a Dorotea a sus padres, o hacer lo que más les pareciese conveniente( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Estábase el barbero aún de rodillas, teniendo gran cuenta de disimular la risa y de que no se le cayese la barba, con cuya caÃda quizá quedaran todos sin conseguir su buena intención; y, viendo que ya el don estaba concedido, y con la diligencia que don Quijote se alistaba para ir a cumplirle, se levantó y tomó de la otra mano a su señora, y entre los dos la subieron en la mula; luego subió don Quijote sobre Rocinante y el barbero se acomodó en su cabalgadura, quedándose Sancho a pie, donde de nuevo se le renovó la pérdida del rucio, con la falta que entonces le hacÃa; mas todo lo llevaba con gusto, por parecerle que ya su señor estaba puesto en camino y muy a pique de ser emperador, porque sin duda alguna pensaba que se habÃa de casar con aquella princesa y ser, por lo menos, rey de Micomicón; sólo le daba pesadumbre el pensar que aquel reino era en tierra de negros, y que la gente que por sus vasallos le diesen habÃan de ser todos negros, a lo cual hizo luego en su imaginación un buen remedio, y dÃjose a sà mismo: —¿Qué se me da a mà que mis vasallos sean negros? ¿Habrá más que cargar con ellos y traerlos a España, donde los podré vender, y adonde me los pagarán de contado, de cuyo dinero podré comprar algún tÃtulo o algún oficio con que vivir descansado todos los dÃas de mi vida? ¡No, sino dormÃos, y no tengáis ingenio ni habilidad para disponer de las cosas y para vender treinta o diez mil vasallos en dácame esas pajas! ¡Par Dios que los he de volar, chico con grande, o como pudiere; y que por negros que sean los he de volver blancos, o amarillos; llegaos, que me mamo el dedo! 212Con esto andaba tan solÃcito y tan contento, que se le olvidaba la pesadumbre de caminar a pie( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* No se hubo bien encerrado, cuando la huéspeda arremetió al barbero y, asiéndole de la barba, dijo: —Para mi santiguada, que no se ha aún de aprovechar más de mi rabo para su barba, y que me ha de volver mi cola; que anda lo de mi marido por esos suelos, que es vergüenza; digo, el peine que solÃa yo colgar de mi buena cola( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Y las que se intentan por Dios y por el mundo juntamente, son aquellas de los valerosos soldados, que apenas veen en el contrario muro abierto tanto espacio cuanto es el que pudo hacer una redonda bala de artillerÃa, cuando, puesto aparte todo temor, sin hacer discurso ni advertir al manifiesto peligro que les amenaza, llevados en vuelo de las alas del deseo de volver por su fe, por su nación y por su rey, se arrojan intrépidamente por la mitad de mil contrapuestas muertes que los esperan( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Lotario le respondió que no pensaba más darle puntada en aquel negocio, porque respondÃa tan áspera y desabridamente, que no tendrÃa ánimo para volver a decirle cosa alguna( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Y siendo asÃ, ¿de qué te espantas, o de qué temes, si lo mismo debe de haber acontecido a Lotario, habiendo tomado el amor por instrumento de rendirnos la ausencia de mi señor? Y era forzoso que en ella se concluyese lo que el amor tenÃa determinado, sin dar tiempo al tiempo, para que Anselmo le tuviese de volver y con su presencia quedase imperfecta la obra.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Poco tardó en volver de su desmayo Camila y, al volver en sÃ, dijo: —¿Por qué no vas, Leonela, a llamar al más leal amigo de amigo que vio el sol o cubrió la noche? ¡Acaba, corre, aguija, camina, no se esfogue con la tardanza el fuego de la cólera que tengo, y se pase en amenazas y maldiciones la justa venganza que espero! —Ya voy a llamarle, señora mÃa —dijo Leonela—; mas hasme de dar primero esa daga, porque no hagas cosa, en tanto que falto, que dejes con ella que llorar toda la vida a todos los que bien te quieren( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —Ve segura, Leonela amiga, que no haré —respondió Camila—, porque, ya que sea atrevida y simple a tu parecer en volver por mi honra, no lo he de ser tanto como aquella Lucrecia, de quien dicen que se mató sin haber cometido error alguno, y sin haber muerto primero a quien tuvo la causa de su desgracia; yo moriré si muero, pero ha de ser vengada y satisfecha del que me ha dado ocasión de venir a este lugar a llorar sus atrevimientos, nacidos tan sin culpa mÃa( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Sólo Sancho, como ya se ha dicho, era el afligido, el desventurado y el triste; y asÃ, con malencónico semblante entró a su amo, el cual acababa de despertar, a quien dijo: 268—Bien puede vuestra merced, señor Triste Figura, dormir todo lo que quisiere, sin cuidado de matar a ningún gigante ni de volver a la princesa su reino; que ya todo está hecho y concluido( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Volvimos a Constantinopla, y el año siguiente, que fue el de setenta y tres, se supo en ella cómo el señor don Juan habÃa ganado a Túnez y quitado aquel reino a los turcos, y puesto en posesión dél a Muley Hamet, cortando las esperanzas que de volver a reinar en él tenÃa Muley Hamida, el moro más cruel y más valiente que tuvo el mundo.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Esto decÃa y contenÃa el segundo papel, lo cual visto por todos, cada uno se ofreció a querer ser el rescatado, y prometió de ir y volver con toda puntualidad, y también yo me ofrecà a lo mismo; a todo lo cual se opuso el renegado, diciendo que en ninguna manera consentirÃa que ninguno saliese de libertad hasta que fuesen todos juntos, porque la experiencia le habÃa mostrado cuán mal cumplÃan los libres las palabras que daban en el cautiverio; porque muchas veces habÃan usado de aquel remedio algunos principales cautivos, rescatando a uno que fuese a Valencia o Mallorca con dineros para poder armar una barca y volver por los que le habÃan rescatado, y nunca habÃan vuelto.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Porque, decÃa, la libertad alcanzada y el temor de no volver a perderla les borraba de la memoria todas las obligaciones del mundo.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* VolvÃmosle boca abajo, volvió mucha agua, tornó en sà al cabo de dos horas, en las cuales, habiéndose trocado el viento, nos convino volver hacia tierra y hacer fuerza de remos por no embestir en ella; mas quiso nuestra buena suerte que llegamos a una cala que se hace al lado de un pequeño promontorio o cabo, que de los moros es llamado el de la «Cava RumÃa», que en nuestra lengua quiere decir «la mala mujer cristiana»; y es tradición entre los moros que en aquel lugar está enterrada la Cava, por quien se perdió España; porque cava en su lengua quiere decir mujer mala, y rumÃa, cristiana, y aun tienen por mal agüero llegar allà a dar fondo cuando la necesidad les fuerza a ello, porque nunca le dan sin ella, puesto que para nosotros no fue abrigo de mala mujer, sino puerto seguro de nuestro remedio, según andaba alterada la mar.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —¿Qué habéis de querer, o qué ha de ordenar el cielo, fuera de consentir en volveros, porque no ha de ser posible otra cosa? Todas estas razones que entre los dos pasaban oyó el mozo de mulas, junto a quien don Luis estaba, y, levantándose de allÃ, fue a decir lo que pasaba a don Fernando y a Cardenio y a los demás, que ya vestido se habÃan; a los cuales dijo como aquel hombre llamaba de don a aquel muchacho, y las razones que pasaban, y como le querÃa volver a casa de su padre, y el mozo no querÃa; y con esto, y con lo que dél sabÃan, de la buena voz que el cielo le habÃa dado, vinieron todos en gran deseo de saber más particularmente quién era, y aun de ayudarle, si alguna fuerza le quisiesen hacer; y asÃ, se fueron hacia la parte donde aún estaba hablando y porfiando con su criado( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Pero el que más se desesperaba era el barbero, cuya bacÃa allà delante de sus ojos se le habÃa vuelto en yelmo de Mambrino, y cuya albarda pensaba sin duda alguna que se le habÃa de volver en jaez rico de caballo, y los unos y los otros se reÃan de ver cómo andaba don Fernando tomando los votos de unos en otros, hablándolos al oÃdo, para que en secreto declarasen si era albarda o jaez aquella joya, sobre quien tanto se habÃa peleado.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Sosegadas, pues, estas dos pendencias, que lo eran las más principales y de más tomo, restaba que los criados de don Luis se contentasen de volver los tres, y que el uno quedase para acompañarle donde don Fernando le querÃa llevar; y como ya la buena suerte y mejor fortuna habÃa comenzado a romper lanzas y a facilitar dificultades en favor de los amantes de la venta y de los valientes della, quiso llevarlo al cabo y dar a todo felice suceso, porque los criados se contentaron de cuanto don Luis querÃa, de que recibió tanto contento doña Clara, que ninguno en aquella sazón la mirara al rostro que no conociera el regocijo de su alma( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Y no supo qué hacerse, sino volver las espaldas y quitarse de la enojada presencia de su señor.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Dos dÃas eran ya pasados los que habÃa que toda aquella ilustre compañÃa estaba en la venta, y, pareciéndoles que ya era tiempo de partirse, dieron orden para que, sin ponerse al trabajo de volver Dorotea y don Fernando con don Quijote a su aldea con la invención de la libertad de la reina Micomicona, pudiesen el cura y el barbero llevársele como deseaban, y procurar la cura de su locura en su tierra.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —Pues asà es —dijo el canónigo—, llévense allá todas las cabalgaduras, y haced volver la acémila( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —Sà doy —respondió don Quijote, que todo lo estaba escuchando—; cuanto más que el que está encantado, como yo, no tiene libertad para hacer de su persona lo que quisiere, porque el que le encantó le puede hacer que no se mueva de un lugar en tres siglos, y si hubiere huido, le hará volver en volandas( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Llegó el cabrero y, asiéndola de los cuernos como si fuera capaz de discurso y entendimiento, le dijo: —¡Ah cerrera, cerrera; manchada, manchada, y cómo andáis vos estos dÃas de pie cojo! ¿Qué lobos os espantan, hija?; ¿no me diréis qué es esto, hermosa? Mas ¿qué puede ser sino que sois hembra, y no podéis estar sosegada; que mal haya vuestra condición y la de todas aquellas a quien imitáis? Volved, volved, amiga; que si no tan contenta, a lo menos, estaréis más segura en vuestro aprisco, o con vuestras compañeras; que si vos, que las habéis de guardar y encaminar, andáis tan sin guÃa y tan descaminada, ¿en qué podrán parar ellas? Contento dieron las palabras del cabrero a los que las oyeron, especialmente al canónigo, que le dijo: 347 —Por vida vuestra, hermano, que os soseguéis un poco, y no os acuciéis en volver tan presto esa cabra a su rebaño; que pues ella es hembra, como vos decÃs, ha de seguir su natural distinto, por más que vos os pongáis a estorbarlo( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* El cabrero dio dos palmadas sobre el lomo a la cabra, que por los cuernos tenÃa, diciéndole: —Recuéstate junto a mÃ, manchada; que tiempo nos queda para volver a nuestro apero( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* En resolución, estando todos en regocijo y fiesta, sino los dos aporreantes que se carpÃan, oyeron el son de una trompeta, tan triste, que les hizo volver los rostros hacÃa donde les pareció que sonaba; pero el que más se alborotó de oÃrle fue don Quijote, el cual, aunque estaba debajo del cabrero, harto contra su voluntad y más que medianamente molido, le dijo: —Hermano demonio, que no es posible que dejes de serlo, pues has tenido valor y fuerzas para sujetar las mÃas, ruégote que hagamos treguas, no más de por una hora, porque el doloroso son de aquella trompeta que a nuestros oÃdos llega me parece que a alguna nueva aventura me llama( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Pues, hermano —le respondà yo—, vos os podéis volver a vuestra China a las diez o a las veinte o a las que venÃs despachado, porque yo no estoy con salud para ponerme en tan largo viaje.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —¡Ay! —dijo a este punto la sobrina— ¡que me maten, si no quiere mi señor volver a ser caballero andante! A lo que dijo don Quijote: 373 374—Caballero andante he de morir, y baje o suba el Turco cuando él quisiere y cuan poderosamente pudiere; que otra vez digo que Dios me entiende( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —¿Querrás tú decir agora, Sancho —respondió don Quijote— que no me dolÃa yo cuando a ti te manteaban? Y si lo dices, no lo digas, ni lo pienses, pues más dolor sentÃa yo entonces en mi espÃritu que tú en tu cuerpo; pero dejemos esto aparte por agora, que tiempo habrá donde lo ponderemos y pongamos en su punto; y dime, Sancho amigo, ¿qué es lo que dicen de mà por ese lugar, en qué opinión me tiene el vulgo, en qué los hidalgos y en qué los caballeros? ¿Qué dicen de mi valentÃa, qué de mis hazañas y qué de mi cortesÃa? ¿Qué se plática del asumpto que he tomado de resucitar y volver al mundo la ya olvidada orden caballeresca? Finalmente, quiero, Sancho, me digas lo que acerca desto ha llegado a tus oÃdos, y esto me has de decir, sin añadir al bien ni quitar al mal cosa alguna; que de los vasallos leales es decir la verdad a sus señores en su ser y figura propia, sin que la adulación la acreciente, o otro vano respeto la disminuya; y quiero que sepas, Sancho, que si a los oÃdos de los prÃncipes llegase la verdad desnuda, sin los vestidos de la lisonja, otros siglos correrÃan, otras edades serÃan tenidas por más de hierro que la nuestra, que entiendo que de las que ahora se usan es la dorada; sÃrvate este advertimiento, Sancho, para que discreta y bien intencionadamente pongas en mis oÃdos la verdad de las cosas que supieres de lo que te he preguntado( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —Mirad, Teresa —respondió Sancho—: yo estoy alegre porque tengo determinado de volver a servir a mi amo don Quijote, el cual quiere la vez tercera salir a buscar las aventuras, y yo vuelvo a salir con él porque lo quiere asà mi necesidad, junto con la esperanza que me alegra de pensar si podré hallar otros cien escudos como los ya gastados, puesto que me entristece el haberme de apartar de ti y de mis hijos; y si Dios quisiera darme de comer a pie enjuto y en mi casa, sin traerme por vericuetos y encrucijadas, pues lo podÃa hacer a poca costa y no más de quererlo, claro está que mi alegrÃa fuera más firme y valedera, pues que la que tengo va mezclada con la tristeza del dejarte; asÃ, que dije bien que holgara, si Dios quisiera, de no estar contento( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* De lo que le pasó a don Quijote con su sobrina y con su ama, y es uno de los importantes capÃtulos de toda la historia En tanto que Sancho Panza y su mujer Teresa Cascajo pasaron la impertinente referida plática, no estaban ociosas la sobrina y el ama de don Quijote, que por mil señales iban coligiendo que su tÃo y señor querÃa desgarrarse la vez tercera y volver al ejercicio de su, para ellas, mal andante caballerÃa; procuraban por todas las vÃas posibles apartarle de tan mal pensamiento, pero todo era predicar en desierto y majar en hierro frÃo.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* encantado, y venÃa tal el triste, que no le conociera la madre que le parió: flaco, amarillo, los ojos hundidos en los últimos camaranchones del celebro; que para haberle de volver algún tanto en sÃ, gasté mas de seiscientos huevos, como lo sabe Dios y todo el mundo, y mis gallinas que no me dejarán mentir( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Si con estas esperanzas y aditamentos vos, Sancho, gustáis de volver a servirme, sea en buena hora; que pensar que yo he de sacar de sus términos y quicios la antigua usanza de la caballerÃa andante, es pensar en lo escusado( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Donde se cuenta la industria que Sancho tuvo para encantar a la señora Dulcinea, y de otros sucesos tan ridÃculos como verdaderos Llegando el autor desta grande historia a contar lo que en este capÃtulo cuenta, dice que quisiera pasarle en silencio, temeroso de que no habÃa de ser creÃdo; porque las locuras de don Quijote llegaron aquà al termino y raya de las mayores que pueden imaginarse, y aun pasaron dos tiros de ballesta más allá de las mayores; finalmente, aunque con este miedo y recelo, las escribió de la misma manera que él las hizo, sin añadir ni quitar a la historia un átomo de la verdad, sin dársele nada por las objeciones que podÃan ponerle de mentiroso; y tuvo razón, porque la verdad adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira como el aceite sobre el agua; y, asÃ, prosiguiendo su historia, dice que, asà como don Quijote se emboscó en la floresta, encinar, o selva junto al gran Toboso, mandó a Sancho volver a la ciudad, y que no volviese a su presencia sin haber primero hablado de su parte a su señora, pidiéndola fuese servida de dejarse ver de su cautivo caballero y se dignase de echarle su bendición para que pudiese esperar por ella felicÃsimos sucesos de todos sus acometimientos y dificultosas empresas.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Con esto que pensó Sancho Panza quedó sosegado su espÃritu, y tuvo por bien acabado su negocio, y deteniéndose allà hasta la tarde, por dar lugar a que don Quijote pensase que le habÃa tenido para ir y volver del Toboso; y sucediole todo tan bien, que, cuando se levantó para subir en el rucio, vio que del Toboso hacia donde él estaba venÃan tres labradoras sobre tres pollinos, o pollinas, que el autor no lo declara, aunque más se puede creer que eran borricas, por ser ordinaria caballerÃa de las aldeanas; pero como no va mucho en esto, no hay para qué detenernos en averiguarlo( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Y asà era la verdad, porque en viéndose a caballo Dulcinea, todas picaron tras ella y dispararon a correr, sin volver la cabeza atrás por espacio de más de 413 414media legua.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Con esto, acortando razones, subieron a caballo, y don Quijote volvió las riendas a Rocinante para tomar lo que convenÃa del campo para volver a encontrar a su contrario, y lo mesmo hizo el de los Espejos; pero no se habÃa apartado don Quijote veinte pasos, cuando se oyó llamar del de los Espejos, y partiendo los dos el camino, el de los Espejos le dijo: —Advertid, señor caballero, que la condición de nuestra batalla es que el vencido, como otra vez he dicho, ha de quedar a discreción del vencedor( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* En esto, volvió en sà el de los Espejos, lo cual visto por don Quijote, le puso la punta desnuda de su espada encima del rostro, y le dijo: —Muerto sois, caballero, si no confesáis que la sin par Dulcinea del Toboso se aventaja en belleza a vuestra Casildea de Vandalia; y demás de esto habéis de prometer, si de esta contienda y caÃda quedárades con vida, de ir a la ciudad del Toboso, y presentaros en su presencia de mi parte, para que haga de vos lo que más en voluntad le viniere; y si os dejare en la vuestra, asà mismo habéis de volver a buscarme, que el rastro de mis hazañas os servirá de guÃa que os traiga donde yo estuviere, y a decirme lo que con ella hubiéredes pasado; condiciones que, conforme a las que pusimos antes de nuestra batalla, no salen de los términos de la andante caballerÃa( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —Confieso —dijo el caÃdo caballero— que vale más el zapato descosido y sucio de la señora Dulcinea del Toboso, que las barbas mal peinadas, aunque limpias, de Casildea, y prometo de ir y volver de su presencia a la vuestra y daros entera y particular cuenta de lo que me pedÃs( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —Eso os cumple —respondió Sansón—, porque pensar que yo he de volver a la mÃa hasta haber molido a palos a don Quijote es pensar en lo escusado, y no me llevará ahora a buscarle el deseo de que cobre su juicio, sino el de la venganza; que el dolor grande de mis costillas no me deja hacer mas piadosos discursos( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Lloraba Sancho la muerte de su señor, que aquella vez sin duda creÃa que llegaba en las garras de los leones, maldecÃa su ventura y lo llamaba menguada la hora en que le vino al pensamiento volver a servirle; pero no por llorar y lamentarse dejaba de aporrear al rucio para que se alejase del carro.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* HÃzolo asà el leonero, y don Quijote, poniendo en la punta de la lanza el lienzo con que se habÃa limpiado el rostro de la lluvia de los requesones, comenzó a llamar a los que no dejaban de huir ni de volver la cabeza a cada paso, todos en tropa y antecogidos del hidalgo; pero alcanzando Sancho a ver la señal del blanco paño, dijo: —Que me maten si mi señor no ha vencido a las fieras bestias, pues nos llama( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* No quiero otro gusto o gloria, otra palma o vencimiento, otro triunfo, otra vitoria, sino volver al contento que es pesar en mi memoria( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Cosas imposibles pido, pues volver el tiempo a ser después que una vez ha sido, no hay en la tierra poder que a tanto se haya estendido( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Llegose, en fin, el dÃa de su partida, tan alegre para don Quijote como triste y aciago para Sancho Panza, que se hallaba muy bien con la abundancia de la casa de don Diego, y rehusaba de volver a la hambre que se usa en las florestas y despoblados, y a la estrecheza de sus mal proveÃdas alforjas; con todo esto, las llenó y colmó de lo más necesario que le pareció( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —Para mà no es opinión, sino verdad asentada —replicó Corchuelo—; y si queréis que os lo muestre con la experiencia, espadas traéis, comodidad hay, yo pulsos y fuerzas tengo, que acompañadas de mi ánimo, que no es poco, os harán confesar que yo no me engaño; apeaos y usad de vuestro compás de pies, de vuestros cÃrculos y vuestros ángulos y ciencia, que yo espero de haceros ver estrellas a medio dÃa con mi destreza moderna y zafia, en quien espero, después de Dios, que está por nacer hombre que me haga volver las espaldas, y que no le hay en el mundo a quien yo no le haga perder tierra( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —En eso de volver o no las espaldas, no me meto —replicó el diestro—, aunque podrÃa ser que en la parte donde la vez primera clavásedes el pie, allà os abriesen la sepultura; quiero decir, que allà quedásedes muerto por la despreciada destreza( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* A todo esto no respondió Sancho porque dormÃa, ni despertara tan presto si don Quijote con el cuento de la lanza no le hiciera volver en sÃ.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Iba don Quijote dando voces que le diesen soga y más soga, y ellos se la daban poco a poco, y cuando las voces, que acanaladas por la cueva salÃan, dejaron de oÃrse, ya ellos tenÃan descolgadas las cien brazas de soga, y fueron de parecer de volver a subir a don Quijote, pues no le podÃan dar más cuerda; con todo eso, se detuvieron como media hora, al cabo del cual espacio volvieron a recoger la soga con mucha facilidad y sin peso alguno, señal que les hizo imaginar que don Quijote se quedaba dentro, y, creyéndolo asà Sancho, lloraba amargamente y tiraba con mucha priesa por desengañarse; pero llegando, a su parecer, a poco más de las ochenta brazas, sintieron peso, de que en estremo se alegraron.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* que no me cansase en ello, porque serÃa en balde, y más, porque se llegaba la hora donde me convenÃa volver a salir de la sima.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Esto dicho, se tornaron a dividir y a volver a sus rebuznos, y a cada paso se engañaban y volvÃan a juntarse, hasta que se dieron por contraseño que para entender que eran ellos y no el asno, rebuznasen dos veces, una 487 488tras otra; con esto, doblando a cada paso los rebuznos, rodearon todo el monte sin que el perdido jumento respondiese, ni aun por señas.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Y el muchacho dijo: —Miren cuánta y cuán lúcida caballerÃa sale de la ciudad en siguimiento de los dos católicos amantes, cuántas trompetas que suenan, cuántas dulzainas que tocan y cuántos atabales y atambores que retumban; témome que los han de alcanzar y los han de volver atados a la cola de su mismo caballo, que serÃa un horrendo espetáculo( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* El ventero y Sancho dijeron que asà lo harÃan, y luego maese Pedro alzó del suelo, con la cabeza menos, al rey Marsilio de Zaragoza, y dijo: —Ya se vee cuán imposible es volver a este rey a su ser primero, y, asÃ, me parece, salvo mejor juicio, que se me dé por su muerte, fin y acabamiento cuatro reales y medio( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Maese Pedro no quiso volver a entrar en más dimes ni diretes con don Quijote, a quien él conocÃa muy bien, y asÃ, madrugó antes que el sol y, cogiendo las reliquias de su retablo y a su mono, se fue también a buscar sus aventuras.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Si el que le dio los palos, aunque se los dio a hurta cordel, pusiera mano a su espada y se estuviera quedo haciendo rostro a su enemigo, quedara el apaleado agraviado y afrentado juntamente; agraviado, porque le dieron a traición; afrentado, porque el que le dio sustentó lo que habÃa hecho, sin volver las espaldas y a pie quedo.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Diéronle a don Quijote un vestido de monte y a Sancho otro verde, de finÃsimo paño; pero don Quijote no se le quiso poner, diciendo que otro dÃa habÃa de volver al duro ejercicio de las armas, y que no podÃa llevar consigo guardarropas ni reposterÃas( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —Yo creo —dijo la duquesa—, que mi buena doña RodrÃguez tiene razón, y muy grande; pero conviene que aguarde tiempo para volver por sà y por las demás dueñas, para confundir la mala opinión de aquel mal boticario y desarraigar la que tiene en su pecho el gran Sancho Panza( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Digo, en fin, señora doña RodrÃguez, que como vuesa merced salve y deje a una parte todo recado amoroso, puede volver a encender su vela, y vuelva, y departiremos de todo lo que más mandare y más en gusto le viniere, salvando, como digo, todo incitativo melindre( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Al entrar de la calle de Santiago, en Madrid, que es algo estrecha, venÃa a salir por ella un alcalde de Corte, con dos alguaciles delante, y, asà como mi buen escudero le vio, volvió las riendas a la mula, dando señal de volver a acompañarle.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Él, importunado de mis ruegos, condecendió con mi deseo y, poniéndome este vestido y él vestiéndose de otro mÃo que le está como nacido, porque él no tiene pelo de barba y no parece sino una doncella hermosÃsima, esta noche, debe de haber una hora poco más o menos, nos salimos de casa y, guiados de nuestro mozo y desbaratado discurso, hemos rodeado todo el pueblo y, cuando querÃamos volver a casa, vimos venir un gran tropel de gente, y mi hermano me dijo: «Hermana, esta debe de ser la ronda; aligera los pies y pon alas en ellos, y vente tras mà corriendo porque no nos conozcan; que nos será mal contado ».( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Ella, enderezando la voz y el rostro a don Quijote, dijo: —DÃas ha, valeroso caballero, que os tengo dada cuenta de la sinrazón y alevosÃa que un mal labrador tiene fecha a mi muy querida y amada fija, que es esta desdichada que aquà está presente, y vos me habedes prometido de volver por ella, enderezándole el tuerto que le tienen fecho, y agora ha llegado a mi noticia que os queredes partir deste castillo en busca de las buenas venturas que Dios os depare; y asÃ, querrÃa que antes que os escurriésedes por esos caminos, desafiásedes a este rústico indómito y le hiciésedes que se casase con mi hija, en cumplimiento de la palabra que le dio de ser su esposo, antes y primero que yogase con ella; porque pensar que el duque mi señor me ha de hacer justicia es pedir peras al olmo, por la ocasión que ya a vuesa merced en puridad tengo declarada.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Enalbardado, pues, el rucio, con gran pena y pesar subió sobre él, y, encaminando sus palabras y razones al mayordomo, al secretario, al maestresala y a Pedro Recio el doctor, y a otros muchos que allà presentes estaban, dijo: —Abrid camino, señores mÃos, y dejadme volver a mi antigua libertad; dejadme que vaya a buscar la vida pasada, para que me resucite de esta muerte presente.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Admirose Sancho de verse nombrar por su nombre, y de verse abrazar del estranjero peregrino, y después de haberle estado mirando, sin hablar palabra, con mucha atención, nunca pudo conocerle; pero viendo su suspensión el peregrino, le dijo: —¿Cómo y es posible, Sancho Panza hermano, que no conoces a tu vecino Ricote el morisco, tendero de tu lugar? Entonces Sancho le miró con más atención, y comenzó a rafigurarle, y, finalmente, le vino a conocer de todo punto, y, sin, apearse del jumento, le echó los brazos al cuello y le dijo: —¿Quién diablos te habÃa de conocer, Ricote, en ese traje de moharracho que traes? Dime: ¿quién te ha hecho franchote, y cómo tienes atrevimiento de volver a España donde, si te cogen y conocen, tendrás harta mala ventura? —Si tú no me descubres, Sancho —respondió el peregrino—, seguro estoy; que en este traje no habrá nadie que me conozca; y apartémonos del camino a aquella alameda que allà parece, donde quieren comer y reposar mis compañeros, y allà comerás con ellos, que son muy apacible gente.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* No hemos conocido el bien hasta que le hemos perdido, y es el deseo tan grande que casi todos tenemos de volver a España que los más de aquellos, y son muchos, que saben la lengua como yo, se vuelven a ella, y dejan allá sus mujeres y sus hijos desamparados: tanto es el amor que la tienen; y agora conozco y experimento lo que suele decirse: que es dulce el amor de la patria.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Llegaron, volvieron a subir amo y mozo, y sin volver a despedirse de la Arcadia fingida o contrahecha y, con más vergüenza que gusto, siguieron su camino( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Mandóselos volver al punto Roque Guinart, y, mandando poner los suyos en ala, mandó traer allà delante todos los vestidos, joyas y dineros, y todo aquello que desde la última repartición habÃan robado, y, haciendo brevemente el tanteo, volviendo lo no repartible y reduciéndolo a dineros, lo repartió por toda su compañÃa con tanta legalidad y prudencia, que no pasó un punto ni defraudó nada de la justicia distributiva.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Acaecio, pues, que yendo don Quijote con el aplauso que se ha dicho, un castellano2211 66 que leyó el rétulo de las espaldas, alzó la voz, diciendo: —¡Válgate el diablo por don Quijote de la Mancha! ¿Cómo que hasta aquà has llegado sin haberte muerto los infinitos palos que tienes a cuestas? Tú eres loco, y si lo fueras a solas y dentro de las puertas de tu locura, fuera menos mal; pero tienes propiedad de volver locos y mentecatos a cuantos te tratan y comunican; si no, mÃrenlo por estos señores que te acompañan.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Allà iba y venÃa, y se alegraba entre si mismo, creyendo que habÃa de ver presto su cumplimiento, y Sancho, aunque aborrecÃa el ser gobernador, como queda dicho, todavÃa deseaba volver a mandar y a ser obedecido; que esta mala ventura trae consigo el mando, aunque sea de burlas( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Vino también conmigo este renegado español (señalando al que habÃa hablado primero), del cual sé yo bien que es cristiano encubierto y que viene con mas deseo de quedarse en España que de volver a BerberÃa; la demás chusma del bergantÃn son moros y turcos, que no sirven de más que de bogar al remo.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Diéronse muchos medios, pero ninguno fue tal como el que dio el renegado español que se ha dicho, el cual se ofreció de volver a Argel en algún barco pequeño, de hasta seis bancos, armado de remeros cristianos, porque él sabia dónde, cómo y cuándo podÃa y debÃa desembarcar; y, asimismo, no ignoraba la casa donde don Gaspar quedaba( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* El prosiguió su camino y yo me volvà vencido, corrido y molido de la caÃda, que fue a demás peligrosa; pero no por esto se me quitó el deseo de volver a buscarle y a vencerle, como hoy se ha visto.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —Oh señor —dijo don Antonio—, Dios os perdone el agravio que habéis hecho a todo el mundo en querer volver cuerdo al más gracioso loco que hay en él.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* No veis, señor, que no podrá llegar el provecho que cause la cordura de don Quijote a lo que llega el gusto que da con sus desvarÃos; pero yo imagino que toda la industria del señor bachiller no ha de ser parte para volver cuerdo a un hombre tan rematadamente loco, y, si no fuese contra caridad, dirÃa que nunca sane don Quijote, porque, con su salud, no solamente perdemos sus gracias, sino las de Sancho Panza su escudero; que cualquiera dellas puede volver a alegrar a la misma melancolÃa.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* El visorrey consintió en todo lo propuesto; pero don Gregorio, sabiendo lo que pasaba, dijo que en ninguna manera podÃa ni querÃa dejar a doña Ana Félix; pero, teniendo intención de ver a sus padres y de dar traza de volver por ella, vino en el decretado concierto.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Camina, pues, amigo Sancho, y vamos a tener en nuestra tierra el año del noviciado, con cuyo encerramiento cobraremos virtud nueva para volver al nunca de mà olvidado ejercicio de las armas( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Y asÃ, ¡oh tú, Radamanto, que conmigo juzgas en las cavernas lóbregas de Lite!, pues sabes todo aquello que en los inescrutables hados está determinado acerca de volver en sà esta doncella, dilo y decláralo luego, por que no se nos dilate el bien que con su nueva vuelta esperamos( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Durmiéronse los dos, y en este tiempo quiso escribir y dar cuenta Cide Hamete, autor desta grande historia, qué les movió a los duques a levantar el edificio de la máquina referida; y dice que, no habiéndosele olvidado al bachiller Sansón Carrasco cuando el Caballero de los Espejos fue vencido y derribado por don Quijote, cuyo vencimiento y caÃda borró y deshizo todos sus designios, quiso volver a probar la mano esperando mejor suceso que el pasado.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* De aquà tomó ocasión el duque de hacerle aquella burla, tanto era lo que gustaba de las cosas de Sancho y de don Quijote y, haciendo tomar los caminos cerca y lejos del castillo por todas las partes que imaginó que podrÃa volver don Quijote con muchos criados suyos de a pie y de a caballo, para que por fuerza o de grado le trujesen al castillo si le hallasen( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* —Los de hasta aquà —replicó don Quijote—, que han sido verdaderos en mi daño, los ha de volver mi muerte con ayuda del cielo en mi provecho.( Cervantes - Don Quijote)<>
---------------
* Ir por lana y volver trasquilado
---------------
|